lunes, 27 de julio de 2009

¿Ecléctica Yo? (Mirada retrospectiva)

¿Es posible hoy mantener una determinada manera de hacer arte? ¿Valerse de un repertorio de imágenes más o menos personal? Una tarea difícil.

Cuando comencé a buscar una "imagen propia", allá por los 90', intentaba encontrar una manera de hacer arte que me represente, que pudiera sentir como propia, tanto en sus métodos como procesos, expresión de ideas... me preocupaba "transmitir el mensaje".

Bastante ha transcurrido desde entonces. Series de collagraphs en color, miniprints, técnicas mixtas, impresiones directas de desechos pasadas por la prensa decenas de veces. Esos trabajos algo toscos, en bruto, tenían esa impronta de improvisación, de que estaba previsto, pero no hasta el último detalle. Siempre me interesó eso del grabado, esa cierta incertidumbre, ese imprevisto que modifique lo que había pensado...la posibilidad de sorprenderme y hasta decepcionarme. Como soy una apasionada de la experimentación y me gusta jugar con los materiales y las técnicas, poco a poco me fui alejando de lo tradicional y metiéndome en otras disciplinas, artes o como quiera llamárselos. De lo bidimensional me fui colando en lo tridimensional y el grabado y la estampación se fueron desparramando por el piso, las paredes, el espacio...
Así me fui acercando al soporte del grabado: el papel... y lo experimental se fue dando desde el reciclado, las fibras naturales, los pigmentos y las coladas.
Una cosa lleva a la otra y es entonces que el papel, que normalmente usamos para escribir, dibujar, pintar (es decir, soporte bidimensional) comienza a interesarme para desarrollar propuestas tridimensionales a partir de otra técnica milenaria como la cartapesta. Maravillosa ella también abre un sinfín de posibilidades. Mis manos descubren las texturas, lo liso y lo rugoso, lo suave y lo áspero, lo frío y lo caliente, lo duro y lo blando... no se puede describir con palabras la cantidad de sensaciones que se experimentan cuando uno trabaja. Son simultáneas: el olor del engrudo y el papel húmedo, el sonido del papel al rasgarse, de la lija raspando superficies, el color de las fibras, las formas que crecen, las capas superpuestas que se van descubriendo, lo opaco y lo brillante. Las formas se agrupan, ocupan un espacio, se conectan y desconectan y comienzo a colgar cosas por todo el taller, porque es muy pequeño, no tengo espacio. Pongo montones de clavos y tanzas. Así nacen los "Colgaditos" montones de móviles de madera, mimbre y papel... una experiencia "calderiana" para jugar ligeramente, sutilmente, levemente con el espacio circundante. Lo lleno y lo vacío interactúan y definen la forma. ¿Qué me mueve, me pregunto, desde lo conceptual en esto? No sé... ni siquiera me cuestiono si existe "el concepto" cuando trabajo no soy capaz de racionalizar tanto la experiencia. ¿Seré contemporánea entonces?¿O mi manera de hacer es más parecida a la de los alquimistas medievales, buscando la piedra filosofal, buscando la magia de convertir una cosa en otra, de que algo insignificante se vuelva valioso?

Más dudas que certezas.
Picasso decía: "Yo no busco, encuentro"Picasso era un genio. Yo no.
Yo digo: "Busco, a veces encuentro, pero siempre voy a seguir buscando"
Y como sigo buscando trato de no detenerme demasiado en el camino, cuando algo se va agotando ya tengo otro "yacimiento" a medio excavar.
Los tiempos se vuelven líquidos, los metales se oxidan, los papeles se manchan y amarillean, las telas se desgastan y agujerean, las hojas de los árboles se secan y se caen.... y los puntos suspensivos ... suspenden las palabras... nos dejan esperando... lo que vendrá...

Descubro objetos con historias que no conozco, cosas viejas que pertenecieron a otras personas, que fueron usadas por otros y ahora están en mi taller. Tienen diversas procedencias, pero están aquí por algún motivo, por algo las guardé, por algo me atrajeron. Extraña herencia que moviliza mi sensibilidad. Según Baudrillard los objetos antiguos significan el tiempo.
"No cabe duda que no es el tiempo real, sino que son los signos o indicios culturales del tiempo, lo que se recupera en el objeto antiguo" (J. Baudrillard "El sistema de los objetos")

"El pasado es arcilla que el presente labra a su antojo, interminablemente."

Esta frase borgeana, encontrada en otra página web, me parece brillante. Expresa bellamente la fugacidad del instante.
Si el instante es fugaz, tal vez lo es también el pensamiento, y mi mente salta baches y se para al borde de algún abismo. Trato de atrapar el tiempo, aún cuando se que es imposible. Será seguramente una sucesión de instantes, de fugacidades, de presentes siempre renovados.

Difícil tarea intentar que algo permanezca entre tanta fugacidad. Todo deviene, yo también. Mis trabajos nunca están terminados... los armo, des-armo, construyo, de-construyo (Derrida ¿estará de acuerdo?) No les tengo demasiado respeto, los modifico, corto, rompo y a veces los vuelvo a armar. ¿Será la obsesión del tiempo o es sólo inconformismo?
En las pinturas no puedo romper tanto, puedo borronear, lijar, velar partes de las imágenes pero es interesante ese palimpsesto, reescribir, sobrepintar y que quede una huella de lo anterior. Lo que se hace ahora, sobre lo que hice ayer, lo que haré mañana (que mañana será hoy)sobre lo que hice hoy (que mañana será ayer).

Esto da para mucho más, pero basta por hoy. Mañana sigo.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

El eclecticismo o eclecticidad o eclectinosedad me es muy familiar jajaja muy bueno el articulo, aplicable a un arte que me es mas familiar (la musica). A proposito
mi nombre es Santiago Pereiro, no PereYro.
atte
Santiago Pereiro
jajaja besos marce

Bibiana dijo...

Marce : me encanto y acuerdo con esta frase plagiada tuya .....buscar....alli radica el secreto..... Te aprecio y aprecio tu blog...ahora pasate por el mio, no se si sera de tu eleccion, pero esta hecho con mucho mucho amor ......Nos estamos viendo